Las habilidades profesionales son aspectos del profesionalismo en los cuales puede trabajar activamente. Dichas habilidades corresponden a una de tres áreas: actitud, conducta y presentación. Lo que haga para mejorar en cada una de estas tres áreas aumentará su nivel de profesionalismo y le permitirá dar una mejor impresión a las personas que interactúan con usted.
- Actitud profesional
- Sea positivo. ¡La actitud es todo! El primer paso del profesionalismo es tener una actitud positiva. Comienza en el nivel más básico: usted no puede permitir que su vida personal interfiera con su actitud profesional. Aun cuando tenga un mal día, debe mantener una actitud positiva y evitar descargar su mal humor en otros o dejar que afecte su trabajo.
- Asuma riesgos calculados. Un aspecto de la buena actitud es estar dispuesto a asumir riesgos calculados y probar cosas nuevas. No se conforme con la mediocridad o con ser uno más del montón: continúe esforzándose para alcanzar cosas más grandes y mejores. Al asumir riesgos, comience con cosas pequeñas, comprenda sus limitaciones y determine qué riesgos podrían redundar en la mejor recompensa. Esto aumentará su confianza para asumir más riesgos en el futuro.
- Demuestre confianza en usted mismo. La confianza se gana a través de la experiencia y, más importante aún, cuando aprende de sus experiencias. Con todo, independientemente de cuán confiado usted se sienta, hay diversas formas de demostrar confianza que lo harán un comunicador más eficaz.
- Únase a conversaciones con sus colegas y relaciónese con los demás.
- Establezca contacto visual con las personas cuando hablan.
- Sonría cuando alguien se dirija a usted o le hable directamente.
- Cuando se presente a una persona, siempre utilice su nombre y apellido.
- Tome la iniciativa. Los profesionales se fijan objetivos y saben lo que quieren lograr. No espere a que otros vengan a presentarse: tome la iniciativa y preséntese a las personas que quiera conocer. Intente participar en conversaciones y grupos que pudieran serle útiles para su avance profesional.
- Conducta profesional
- Puntualidad. A no ser que se trate de una emergencia, no corresponde llegar tarde a reuniones, funciones, conferencias o encuentros. Si lo hace, estará sugiriéndole a los demás que cree que su tiempo es más valioso que el de ellos.
- Lenguaje corporal. Siempre intente utilizar un lenguaje corporal y expresiones faciales positivas. Si sonríe, escucha con atención y adopta una postura abierta estará transmitiendo que está verdaderamente interesado en lo que otros dicen y prestándoles atención. El lenguaje corporal puede transmitir confianza e interés, dos cualidades que los patrocinadores, los medios y otras personas influyentes en su carrera podrían considerar atrayentes y valiosas.
- Uso de su teléfono móvil. A menos que se trate de una emergencia, no corresponde utilizar su teléfono celular cuando está con otras personas. Si necesita contestar una llamada, excúsese con amabilidad y vaya a atenderla.
- Conversaciones. Ser capaz de determinar qué temas de conversación son apropiados es otra clave de la conducta profesional. Al hablar en contextos formales (reuniones de negocios u otras ocasiones), debe evitar hacer preguntas personales. Además, al conversar con otros debe evitar interrumpirlos, y es importante pensar antes de hablar. Un profesional nunca adoptará un tono condescendiente ni despreciativo hacia otros, independientemente de experiencias anteriores o niveles de educación.
- Apariencia profesional
Nos guste o no, la gente tiende a juzgar a los demás por su apariencia. Se espera que un profesional se vista de manera respetable, y por eso se le juzgará por la manera en que se viste. En reuniones de negocios, apariciones públicas o eventos donde su condición de jugador profesional de baloncesto es lo más importante, debe evitar las ropas que muestren demasiado, sean informales o sean desprolijas. Las perforaciones corporales, los tatuajes y otras expresiones audaces de la moda no suelen estar bien vistas.
En general, hay tres categorías de indumentaria que pueden ayudarlo a determinar qué ropa debe usar en función de la actividad y el tipo de público. Si tiene dudas, vístase una categoría por encima de lo que le parezca adecuado; en general, la gente no juzga a nadie por estar demasiado bien vestido.
- Indumentaria profesional: El estilo más conservador de ropa para encuentros de negocios. Es lo que se esperaría que use en una oficina, para una entrevista de trabajo o para una cena o una función formal. En el caso de las mujeres, se refiere a un traje formal o un vestido y una chaqueta. En el caso de los hombres, la indumentaria profesional se refiere a un traje o una chaqueta de vestir, pantalones de vestir, corbata, medias y zapatos oscuros.
- Semiformal: Es un estilo menos formal de la indumentaria profesional, pero no significa que sea completamente informal. Es un estilo semiconservador que en general consiste en una camisa con cuello o un suéter, pantalones estilo khaki o pantalones de vestir, y zapatos que hagan juego. Las mujeres también pueden usar vestidos o faldas de largo moderado. Para los hombres, la ropa semiformal consiste en una camisa tipo polo o con botones y un suéter, pantalones estilo khaki o de vestir, y zapatos de vestir. No se necesita usar corbata.
- Informal: Es la ropa que no usaría para ir a trabajar o en una actividad social. Es la ropa de todos los días: pantalones vaqueros, camisetas, sandalias, ropa para ir al gimnasio, zapatillas, etc. Es la indumentaria para los días libres, luego de trabajar o los fines de semana, cuando no está en público ni en ningún papel oficial.