A nadie le gustan los conflictos. Casi todos hacemos lo máximo que podemos para evitarlos. Sin embargo, los conflictos son parte de la vida. Y en algún momento, es probable que deba enfrentarse a conflictos tanto dentro como fuera de la cancha.
Sin embargo, cuando tiene conflictos en un aspecto de su vida los demás aspectos pueden verse afectados. Si no se resuelven, los conflictos personales pueden afectar profundamente su rendimiento en la cancha. La buena noticia es que, si aplica técnicas adecuadas para enfrentarse a los conflictos y resolverlos, tendrá la oportunidad real de fomentar el trabajo en equipo y la confianza.
El objetivo es minimizar la cantidad de conflictos para que pueda concentrarse en rendir a su máximo nivel. Las habilidades de resolución de conflictos pueden dividirse en dos categorías: prevenir los conflictos y resolverlos. Desarrollar buenas habilidades en estas áreas puede tener efectos positivos en todos los demás aspectos de su vida.